En los días que tenemos reservados en Ubud, hemos dejado uno sin excursiones para descansar un poco del ajetreo que llevamos, conocer una de las atracciones que tenemos muy cerquita del hotel, el Mokey Forets, también irnos de compras, que el shopping es una cosa irremediable en los viajes.
Así que salimos del hotel y andando nos acercamos hasta el Monkey forest, está en la misma calle del hotel y pronto llegamos a uno de sus accesos, y claro como no cobran entrada, 20.000 rupias, no es que sea mucho la verdad, y el parque se encuentra limpio, cuidado y con muchos empleados que están pendientes de que los monos y los turistas no se pasen unos con otros.
El Bosque de Monos de Ubud cubre aproximadamente 10 hectáreas y contiene al menos 115 especies diferentes de árboles. El parque es muy boscoso y montañoso, un barranco profundo corre a través de los terrenos del parque, en la parte inferior de la cual fluye un arroyo rocoso. Los senderos permiten a los visitantes acceder a muchas partes del parque, incluido el barranco y el arroyo.
El parque sin ser excesivamente grande está bastante bien para invertir un par de horas en verlo, tiene diferentes senderos, y vas viendo los monos por todas partes.
En 2011, aproximadamente 605 macacos cangrejeros vivían en el Bosque de Monos de Ubud se conocen localmente como el mono balinés de cola larga. El personal del parque alimenta a los monos con batata tres veces al día, proporcionándoles su principal fuente de alimento también se alimenta de hojas de papaya , maíz , pepino , coco y otras frutas locales.
Los monos descansan durante la noche y son más activos durante el día, lo que los pone en contacto constante con los humanos que visitan durante el horario comercial del parque. Los visitantes pueden observar sus actividades diarias (aparearse, pelear, arreglarse y cuidar a sus crías) a corta distancia, e incluso pueden sentarse junto a los monos a lo largo de los senderos del parque.
Lo fuimos recorriendo tranquilamente ya que aunque la sombra abunda y prácticamente apenas el sol es capaz de traspasar el arbolado, la humedad y el calor aprietan los suyo.
La zona más bonita es la que se desciende hasta el río, lógicamente luego hay que subir por una empinadas escaleras, pero vale la pena, no es donde más monos se ven, pero es un paisaje muy selvático.
Dejamos el Monkey Forest, y recorremos la avenida del mismo nombre, para acabar en el Art Market de Ubud, unas callejuelas llenas de tiendecitas donde es difícil pasar en muchos casos de los estrechos que son los pasillos.
En el Art Market se puede encontrar de todo, ropa, calzado, souvenirs, comida, figuras de madera , metal, piedra, en fin las delicias de los amantes del Shopping.
Es un verdadero laberinto de callejuelas con tiendas por todos lados, y cuando ya el calor arrecia dejamos las compras y volvemos hasta la avenida Monkey Forets.
Nos vamos a comer a un Warung que nos recomendó Riasa, un restaurante local y gracias a él volvimos acertar, era un lugar decorado como si fuera un garaje con motos y bicicletas antiguas.
Y comimos estupendamente, comida local, cerveza fresquita, y un buen postre acompañado de café balines, negro y fuerte, como nos gusta.
El local tiene detalles muy logrados como los taburetes hechos con partes de motos.
Nos fuimos satisfechos por un precio módico, poco más de 12 euros los dos, y la tarde para disfrutar de la piscina del hotel y reordenar el equipaje que al día siguiente tenemos excursiones y cambio de hotel y de zona en la isla, nos vamos a las playa de Bali.
PULSA SOBRE ESTE ENLACE PARA VER LA SIGUIENTE ETAPA.- BALI 04 UBUD-KUTA
Que monada 😀😀 son parecidos a los de la india… muy bonito todo,
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Y son bastante tranquilos se nota que no les falta la comida
Nos alegramos de que te guste
Un abrazo
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